Todos sabemos que el cigarrillo afecta notablemente nuestra salud, en forma perjudicial. Innumerables veces hemos escuchado los efectos devastadores sobre el sistema circulatorio y la generación de numerosos tumores en todo nuestro organismo.

La cantidad de sustancias nocivas dentro de un cigarrillo son asombrosamente alarmantes. Dado el impacto del tabaco sobre la circulación sanguínea, al fumar se reduce la llegada de oxígeno y nutrientes a nuestra piel. El tabaco genera mayor producción de radicales libres que suman estrés oxidativo a las células y por eso, propicia el desarrollo de arrugas y suma años a nuestra piel.

Por este mismo efecto y porque el fumar genera una reducción en los niveles de colágeno y elastina así como de vitamina A que brinda color y suavidad a la piel, la piel con el cigarrillo se vuelve opaca, grisácea y áspera.

La piel no sólo se arruga más y pierde suavidad y tonalidad, sino que la dermis y epidermis pierden grosor con el tabaco, haciendo más frecuente el desarrollo de arañitas, várices y flaccidez así como de celulitis.

Por estos mismos motivos y por la menor oxigenación de tejidos, el cabello se seca, pierde brillo y se opaca, afectando notablemente a la estética del fumador. También las manos son afectadas por el hábito de fumar que genera la llamada “uña arlequín” que consiste en una coloración amarillenta y parduzca en las uñas, sobre todo en los dedos que sujetan el cigarrillo.

Es común que la sonrisa se ve afectada por el tabaco también, pues los dientes se manchan a causa del paso del humo del tabaco. También se debilitan teniendo los fumadores, más probabilidades de sufrir pérdidas dentales.

Dado que la salud bucal se ve afectada, las fumadores tienden a tener mal aliento, algo que se suma al mal olor generalizado en la ropa y en el pelo. Por último cabe aclarar que los efectos perniciosos del tabaco sobre la nutrición son diversos y sobre todo, favorecen la pérdida de antioxidantes y la reducción de sus niveles en el organismo, lo cual sabemos quita vitalidad y estética a nuestro cuerpo.

De igual forma, si estamos trabajando duro con dieta y entrenamiento para lucir un cuerpo en forma, debemos saber que el tabaco estropea los beneficios del ejercicio y puede disminuir el volumen de tus músculos, dejando anulado todo el entrenamiento intenso que realizás cada día para verte y sentirte mejor. Deja de fumar por razones estéticas Como ves, el cigarrillo tiene grandes impactos sobre nuestra belleza física y no sólo estropea la salud del organismo. Por esto, además de alejarte de enfermedades, te proponemos dejar de fumar por razones estéticas.

Ni bien abandones el cigarrillo sentirás una mejora en la oxigenación del organismo y ello te estimulará a moverte más con mejores resultados, además, la circulación sanguínea mejorará y con ella disminuirán los efectos adversos del cigarrillo sobre la piel, el cabello y demás.

Por otro lado, recuperarás el gusto y olfato normal sintiendo más sabor a los alimentos y así, podrás estimular el consumo de frutas y verduras cargados de buenos nutrientes y que tanto ayudan a estar y lucir en forma.

Sin duda a largo plazo, tendrás más vitalidad, menos arrugas y mucha más salud que si continúas fumando.

Ya sabés, podés dejar de fumar, no sólo por tu salud, sino también, por tu estética.